miércoles, 29 de julio de 2009

Química y Física

Juanita. Así se llamaba y estoy seguro que todos los que estuvimos en el instituto nos acordamos de ella. Era la profesora de Química y el mito erótico en el alumnado: treinta y pocos, rubia platinada, cuerpo de escándalo, divorciada y una habilidad única para hablar de sexo en clase. Ella se las ingeniaba para, a propósito de la tabla periódica, hablar de la inexplicable atracción dos cuerpos, del intercambios de flujos y de lo importante era que “hacerlo bien, con ganas y responsablemente”. Cuando hablaba del tema los chicos nos poníamos rojos como un tomate, las chicas intercambian miradas reprobatorias y ella tan campante seguía con la clase: “Alguien puede decirme ¿cuál es el número atómico del Samario?” Silencio absoluto en clase, todo el mundo en otro planeta pero a ella no le importaba. Así era Juanita.

Como la vida es cruel después de Juanita tocaba la clase de Física con la profesora Lidiette que no era, para decirlo elegantemente, tan agraciada como su antecesora y el que sus clases se programaran después de las de química siempre nos pareció una broma macabra del director. Treinta y muchos aparentando cincuenta, morena, cabello cortísimo, delgada tirando a escuálida, hortera, eternamente amargada y fama de que en su curso nadie aprobaba. En su clase solo se hablaba de vectores, de las leyes de Newton, de la relatividad pero nunca de sexo. Las dos horas transcurrían entre el tedio, la monotonía y los suspiros de resignación de todos los que pensábamos que el mundo sería distinto poblado de Juanitas.

viernes, 24 de julio de 2009

Conducción temeraria

Que lo pasó en Honduras fue un golpe de Estado no cabe la menor duda tan evidente es que es una de esas extrañas ocasiones en las que reina la unamidad en la comunidad internacional, todos condenan al sector que derrocó a Zelaya y algunos, han aplicado sanciones diplomáticas.

Sin embargo asusta un poco y causa consternación la temeridad del depuesto presidente, que contra golpe y marea, y en vista del fracaso de las negociaciones de San José, ha dispuesto por segunda vez, hacer su entrada triunfal en Honduras, sin tomar en cuenta que con los ánimos tan caldeados puede esperarse todo menos una "jornada pacífica" como se ha dedicado a pregonar. Como de costumbre, los muertos son lo de menos tanto para él como para los golpistas.

Uno pregunta si con tanto consenso internacional no habría sido mejor para "Mel" esperar un poco, seguir recabando apoyos y dar otra oportunidad a la comunidad internacional. Al parecer ha decidido arreglar las cosas el solito, "a lo macho", para desgracia de los hondureños.

martes, 21 de abril de 2009

Una santa para madrid...nos la merecemos

Lo confienso: no suelo leer las cadenas de correo que me envían y menos las que prometen 1000 años desgracias para quien no las reenvíe a sus 80 mejores amigos, pero en este caso no solo la he enviado sino que gustamente la publico en este blog para que alguien se haga eco, es por una buena causa.

Como es bien sabido de todos, en el proceso de beatificación y de canonización es necesario pasar por la Petición Pública de Milagros, siendo requeridos dos milagros para cada uno de los
pasos salvo en el caso de martirio (se da en este caso, pero no aplicable a la beata). Es necesario dirigirse al Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela, para que reúna pruebas y tome
acta notarial de los testimonios y, si los datos lo justifican, enviar dichos materiales a Roma. Así pues, se necesitan personas que hayan sido testigos de:

* Milagro nº 1: Tener una larga carrera en la política. Si milagroso fue su inicio como Concejal del Ayuntamiento de Madrid y Ministra de Educación, no lo fue menos su desempeño como
Presidenta del Senado.

* Milagro nº 2: Cuando tras perder las elecciones autonómicas nadie daba un duro por su futuro político, una milagrosa intervención la lleva a la Presidencia de la Comunidad de Madrid.

* Milagro nº 3: En la plaza de toros de Móstoles convertida en improvisado helipuerto salió menos dañada que su compañero de partido, Rajoy (algunos hablan sólo de medio milagro).

* Milagro nº 4: En Bombay salió milagrosamente "ilesa de un atentado" como recoge alguna prensa (ADN) y que TeleMadrid (Ad Maiorem Espe Gloriam) ha analizado de forma reiterada, extensa y minuciosa. (y de la que ella dio fe en gloriosa conferencia de prensa en tacones y calcetines. Ver foto)

* Milagro nº 5: No menos milagroso es el hecho de haber cegado a buena parte de la población madrileña, algo que desde fuera de la Comunidad de Madrid y de España escapa a la comprensión humana.

* Milagro nº 6: Por último, y ya es increble, está consiguiendo que los miembros del partido popular se espíen y se maten los unos a los otros, sin intervención directa de D. Federico Jimenez
Losantos.

Otros milagros aún no confirmados:

- Hay ya testimonios de que se han detectado señales de intervención milagrosa en Cajamadrid, que está produciendo efectos extraordinarios. No se descarta la destrucción de la cuarta
entidad financiera de España por intercesión de nuestra beata. Ello la revelaría como una auténtica lideresa anticapitalista, siempre al lado de los pobres y los oprimidos.
Ni la Madre Teresa aspiró a tanto...

- No dejes de colaborar! Si has sido testigo directo de estos hechos milagrosos, remite tu testimonio a: Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela. San Justo, 2. 28005 Madrid
diciendo: ¡SI; YO SOY TESTIGO!

sábado, 18 de abril de 2009

La cima del mundo

Sabiamente cantaba Rubén Blades que “la vida te da sorpresas” y con el paso del tiempo uno va descubriendo que efectivamente, la vida es todo menos monótona y a veces comparable a una montaña rusa, que va y viene y en la que uno lo que tiene que hacer es tratar de despeinarse lo menos posible. Hoy somos dueños del mundo y mañana mendigos.

Aunque lo negativo es lo que más se recuerda mi teoría es que las buenas y malas sorpresas están repartidas en un cincuenta por ciento más o menos, porque así como abundan las historias de quienes lo han perdido todo de golpe, hay también quienes lo han ganado todo de golpe, gente a la que de la noche a la mañana la vida les ha dado una agradable sorpresa.

Y como las probabilidades de que te pueda suceder algo malo son iguales a que te pueda ocurrir algo bueno yo prefiero aferrarme a esa idea, sobre todo en estos tiempos en los que todo el mundo habla de crisis y en aire se respira un tufo a pesimismo. Pienso que la cosas están mal pero recuerdo la infinidad de veces que he me he sentido derrotado y como al poco tiempo, estaba en la cima del mundo preguntándome mil veces en como lo había logrado. ¿Cómo lo logré? Ni repajolera idea pero estaba ahí, en lo más alto, viendo mi sueño realizado...

jueves, 12 de marzo de 2009

Cría fama...

La vez que le dije a mi abuela que había venido al mundo para sufrir pasó riéndose por lo menos hora y mientras las lágrimas se le saltaban me decía “¿Cómo que usted sufre? ¡Que ocurrencias!”. ¡Cachondeo absoluto frente a la confesión del nieto!, algo normal en mi familia donde todos están convencidos de que tengo vocación de bufón y entre tíos, primos segundos, terceros y cuartos existe la leyenda negra de que me paso la vida en una pura carcajada.

La culpa de todo la tiene el niño que fui, que desde que aprendió a caminar se acostumbró a hacer el payaso por divertir a los adultos y que a los cuatro años era una máquina imparable de contar chistes. Lo hacía con un desparpajo y una naturalidad que, según dicen, asombraba a todo el mundo sobre todo porque en mi amplio repertorio tenía desde los típicos inocentes chistes de crío hasta algunos bastantes subidos de tono que había escuchado en la calle. Estoy convencido de que durante mucho tiempo mis padres estaban horrorizados pensando en que me convertiría en el típico “showman” cutre que se gana la vida contando anécdotas en las fiestas de pueblo.

Y aunque queda poco de ese gracioso niño regordete, está visto que no he podido librarme de esa fama. Todo este viene a cuento porque como en estos días estoy un poco amargado, he llegado a la conclusión que uno, independiente de la fama de payaso que pueda tener, debería tener el derecho a no morir vulgarmente sino a ascender al cielo, como los profetas de antaño, entre vítores y aplausos, los olés de todo el mundo y alguna que otra carcajada, que uno se merece un final bíblico y estruendoso.



lunes, 2 de marzo de 2009

Facebookseando

Desde que descubrí Facebook estoy que me salgo. Por fin, por fin puedo cotillear en la vida de mis amigos sin tener que hacer preguntas indiscretas y ningún esfuerzo más que un simple clik. En un pis pas tengo acceso a la vida y milagros de mis amigos, y de mis no-amigos, puedo saber si se han cansado, si son felices si tienen una vida tan prometedora como la que decían, si tienen problemas conyugales...todo de todo. Vamos la maravilla de las maravillas.

Como si fuera poco puedo ver sus amistades porque eso de "dime con quien andas y te iré quien eres" es una verdad como la catedral de Burgos y así puedo deducir algunas cosas de su personalidad que no me han querido decir pero yo, que soy listo como el que más, he descubierto. En fin que es el invento que soñaron todas las marujas y marujos del mundo, sería perfecto sino fuera porque tambien mis amigos y no amigos se están enterando de todo lo que hago y deshago. Y eso la verdad mola menos.

sábado, 21 de febrero de 2009

Luz de luna

Aunque no hay nada que me guste más que un día de sol debo confesar que la noche me encanta aunque en un tiempo y galaxia muy lejana le tenía bastante fobia. A mis cinco años me horrorizaba que llegara la noche porque eso significaba que no podía jugar y que pronto tendría que irme a dormir a mi habitación “íngrimo y solo” algo terrible porque como todo niño sabía que los marcianos, esos seres verdes y cabezones de la tele, siempre llegaban de noche. Mi pesadilla recurrente siempre era que a mitad de la madrugada un platillo volador se plantaba en mitad del patio de mi casa y aparecían esos temibles alienígenas.

A los veinte años, mandé a freír churros a los marcianos de mis pesadillas y empecé a cogerle gustillo a la noche sobre todo porque descubrí que la oscuridad nos desinhibe a todos un poquito, transforma la ciudad y como esos extraterrestres, nos volvemos más gamberros y hacemos locuras que en el día nunca se nos ocurriría. A mis cuarenta y tantos de vida he llegado a la conclusión de que si no fuera por la noche, por la luz de luna, viviríamos en un mundo muy pero que muy aburrido.

¡Pobre don Edgar!

Durante muchos años a la persona que más lástima le tuve fue a don Edgar, mi profesor de música durante la Primaria. No sé por qué me daba t...